martes, 12 de agosto de 2014

Si hiciera más oración...

Los evangelios nos muestran a Jesús que llenaba su vida de oración: en el Jordán durante su Bautismo, antes de llamar a los Apóstoles, en la multiplicación de los panes, en la Transfiguración, antes de sanar al sordo y al mudo, en la resurrección de Lázaro, antes de pedir a Pedro su confesión. Toda su actividad fluye de la oración: en la madrugada, al anochecer, pasa noches orando al Padre. Lo vemos participar en las oraciones públicas de su pueblo como en las sinagogas, en el Templo de Jerusalén, bendice y da gracias antes de comer. La Pasión de Cristo es una continua oración del Señor durante la Última Cena, en su agonía en el huerto, en la cruz. Y después de resucitar, vive para siempre para interceder por nosotros. Y yo, si hiciera oración con más frecuencia, tendría el alma más descansada y en paz. La dulzura me acompañaría durante el día y aún dormido, la presencia de Dios me acompañaría durante la noche. Despertaría por la mañana y la oración vendría a mí, porque habría estado velando mi sueño.

3 comentarios:

  1. Padre Hayen Gracias por tan buena reglexion Dios le siga dando luz y sabiduria pues con su ayuda usted nos educa la mente y el espiritu, bendiciones, Adiana Barron

    ResponderBorrar
  2. Gracias padre, si tan solo los católicos dirigiéramos nuestra mirada a Dios por un instante en varias ocasiones durante el día...

    Comparto mi jaculatoria favorita, una comunión espiritual de San José María Escrivá:

    Señor: "Que tu sangre de Dios penetre ne mis venas para hacerme vivir en cada instante la generosidad de la Cruz".

    ¡Que Dios lo siga bendiciendo padre!

    ResponderBorrar
    Respuestas
    1. gracias padre todos sus blogs me han servido para instruir a mis hiijas e hijos aun con los talleres de oracion sus palabras refuerzan mi fe siempre pido a Dios nos lo cuide mucho a ud y a todos nuestros sacerdotes pero especialmente a usted muchas gracias lo amamos




      Borrar

Maridos en la cárcel

Son muchos los hombres que se encuentran detrás de las rejas, pagando por una culpa que no cometieron. Sus esposas los acusaron de delitos s...