El hombre está hecho para la alabanza, y si
no conoce al verdadero Dios, buscará algo grande para darle su corazón. Los dos
mayores dioses falsos a los que el hombre da su corazón, sudor y lágrimas son
la naturaleza y la política. El hombre fácilmente se hace esclavo del sexo, la
muerte, el poder o el Estado totalitario. La Revelación de Dios al pueblo de
Israel trajo la verdadera religión para los pueblos de la tierra. Con el
judaísmo los hombres dejaron de adorar al poder y a la madre naturaleza, para
profundizar su religiosidad en el Dios vivo y verdadero. Dios se reveló como
Aquel que está por encima del mundo natural y de los poderes políticos. Esta
revelación fue fundamental para el desarrollo de la civilización cristiana.
Gracias Padre Hayen por tus reflexiones, y que Dios te siga dando esa sabiduría.
ResponderBorraradoradores de la naturaleza, por eso el dicho 'la naturaleza es sabia' el sabio es el creador de la naturaleza
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