Hace unos años imprimirse un tatuaje era costumbre relacionada con los presidiarios, pandilleros o estrellas de rock, pero en pleno siglo XXI los tatuajes se han convertido en un sector prominente de la industria estética. Solo en Estados Unidos este negocio mueve 2300 millones de dólares al año. ¿Hacen los tatuajes más estéticos nuestros cuerpos? Si viéramos que los tigres se borraran sus bonitas rayas, o que los osos polares se disfrazaran manchando su pelaje con pintas negras o que las cebras cambiaran su blanco y negro por verde y azul… pensaríamos que degradan su ‘tigridad’, su ‘osopolaridad’ o su ‘cebridad’. Y los seres humanos, ¿no degradamos nuestra humanidad cuando grabamos en nuestros cuerpos dragones, estrellas o letras chinas? Porque la guapura luce, más bien, en el vestido y arreglo personal, y el cuerpo humano resplandece de belleza tal como es, al natural, sin pintas que lo envilezcan. Es fácil, para los animales, ser plenamente animales, pues ellos no alteran su naturaleza; pero qué difícil es para los seres humanos vivir en nuestra naturaleza y ser así plenamente hombres.
La nueva presidenta Claudia Sheinbaum, quien dice ser no creyente, empezó su gobierno participando en un ritual de brujería. Hago algunas observaciones con este hecho: 1. Muchos ateos se niegan a creer en el Dios revelado por Cristo debido a que ello exige conversión y compromiso moral, y prefieren dar cauce a su sensibilidad espiritual a través de rituales mágicos de protección contra fuerzas que los puedan perjudicar. Es decir, en el fondo, muchos que se confiesan ateos creen que existe algo que está más allá del mundo natural. ¿Será que la presidenta, en realidad, no es tan atea? 2. Participar en un ritual religioso indígena debería de ser motivo de escándalo para los jacobinos y radicales de izquierda que proclaman la defensa del Estado laico y la no participación de un político en actos de culto público. Ellos deberían de ser coherentes y lanzar sus rabiosos dardos a la presidenta. Si Claudia Sheinbaum hubiera sido bendecida por algún sacerdote con sotana y sobrepelliz a las puert...
Acertado su comentario.
ResponderBorrarExcelente publicación que nos permitió conocer cosas aún más bellas de éste singular sacerdote, descanse el paz el querido Padre Carlos.
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