"En tres días lo reconstruiré". Jesús hablaba del templo de su cuerpo. Él es la piedra angular del templo de Dios y nosotros los bautizados, las piedras vivas. Habita en el templo y en cada piedra el Espíritu Santo. Cuidar los templos es la enseñanza hoy de la Palabra de Dios. Puedo profanar el templo cuando me comporto o visto indignamente en la iglesia, pero además cuando el pecado me domina y soy presa de la embriaguez, la ira, la avaricia, la fornicación o el adulterio. O bien puedo convertirme en profanador de templos si soy violento en casa, si favorezco el aborto o si destruyo, de alguna manera, a mi hermano donde Dios habita. La presencia real de Jesucristo en la Eucaristía nos ayude a amar nuestras iglesias donde Él se hace presente; nos impulse a buscar la santidad personal porque de su Cuerpo y Sangre nos alimentamos; y nos empuje a reverenciar a nuestros hermanos en el amor y el servicio ya que ellos son tabernáculos de Dios. ¡Buen domingo!
La nueva presidenta Claudia Sheinbaum, quien dice ser no creyente, empezó su gobierno participando en un ritual de brujería. Hago algunas observaciones con este hecho: 1. Muchos ateos se niegan a creer en el Dios revelado por Cristo debido a que ello exige conversión y compromiso moral, y prefieren dar cauce a su sensibilidad espiritual a través de rituales mágicos de protección contra fuerzas que los puedan perjudicar. Es decir, en el fondo, muchos que se confiesan ateos creen que existe algo que está más allá del mundo natural. ¿Será que la presidenta, en realidad, no es tan atea? 2. Participar en un ritual religioso indígena debería de ser motivo de escándalo para los jacobinos y radicales de izquierda que proclaman la defensa del Estado laico y la no participación de un político en actos de culto público. Ellos deberían de ser coherentes y lanzar sus rabiosos dardos a la presidenta. Si Claudia Sheinbaum hubiera sido bendecida por algún sacerdote con sotana y sobrepelliz a las puert...
Comentarios
Publicar un comentario
¿Quieres comentar? Antes debo revisar tus palabras y sólo podrá ser comentado públicamente lo que sirva para edificación.