Debe ser angustiante llegar a la muerte y saber que ya no tenemos tiempo de hacer penitencia por el perdón de nuestros pecados, de participar en la Eucaristía y el la Confesión, de escuchar la Palabra de Dios, de visitar al Santísimo, de socorrer a los pobres y necesitados, de consolar a los enfermos, de leer salmos y hacer más oración. ¿Quién llegará a la hora final de su vida con la conciencia tranquila, sin remordimientos y con todos sus pecados ya perdonados? ¡Cuánto tiempo perdemos en cosas efímeras y no aferramos lo más importante! Si nos habituamos a encontrar a Jesús en cada acción de la vida. Si cada acto es ofrecido a Él y se vuelve un encuentro con Él, entonces no esperaremos la muerte sino esperaremos a Jesucristo, e iremos serenos y seguros a cruzar el umbral.
Pregunta: Vivo en El Paso Texas y soy devoto de san Judas Tadeo, del cual tengo dos imágenes de yeso que compré. Mi suegra fue a la Ciudad de México y me compró otra imagen más de san Judas. Acomodó la imagen en su coche y cuando llegó a su hotel vio que la estatua tenía la cabeza quebrada. Cuando lo supe quedé muy impactado porque dicen que, cuando eso ocurre, es porque se ha cumplido algo que se le ha pedido al santo. Mi desconcierto fue mayor cuando compré, acá en El Paso Texas, otro san Judas, de color oro, muy bonito, pero al llegar a mi casa uno de los san Judas que ya tenía, estaba con su cabeza rota. Estoy muy impresionado. No sé a qué se deba, padre. A veces creo que el santo está celoso porque tengo varias imágenes de él. Agradezco su tiempo y le pido que me ayude. Padre Hayen: ¿Cómo? ¿Dos imágenes con cabeza rota? ¡Seguramente tú y tu suegra se van a sacar la lotería! Por favor, muchacho, no peques de ingenuidad. Pero además dices que san Judas está celoso porque tien...
Comentarios
Publicar un comentario
¿Quieres comentar? Antes debo revisar tus palabras y sólo podrá ser comentado públicamente lo que sirva para edificación.