Pregunta: Padre, soy un joven que estudia la universidad. Hace algunos años yo era uno de los más entusiastas en un grupo de confirmaciones de la parroquia. De verdad me encantaba ir a la iglesia porque sentía a Dios muy vivo en la oración y en la alabanza. Hoy he dejado de creer en Dios después de que tuve la experiencia al visitar lugares muy pobres en México. Pude ver mucho sufrimiento, gente pasando hambre y carencias muy feas. Para mí fue una experiencia muy triste descubrir el mundo de la miseria. De hecho me entró una depresión, pero pude salir de ella. Hoy dudo de la existencia de Dios, porque si decimos que Dios es bueno, ¿cómo puede haber tanto sufrimiento en el mundo? Al mismo tiempo extraño mis alabanzas en la parroquia. Oriénteme por favor, padre. Padre Hayen: gracias por tu sinceridad al compartir tu experiencia y tu crisis de fe. Ante la realidad del sufrimiento que hay en el mundo, en este momento de desconcierto has hecho lo correcto. No te quedas sólo con tus pe...
Vida católica: frontera México-Estados Unidos