En esta Jornada Mundial de la Paz me convenzo, una vez más, que Jesucristo es el Rey de la Paz, y que nuestro Señor es quien puede tocar y abrir los corazones más endurecidos por la violencia. Dos hechos históricos muestran que el hombre fue creado para la paz, y no para la violencia. Tropas enemigas en la guerra Durante la Primera Guerra Mundial, se enfrentaban en combate el ejército alemán y el ejército inglés. Cuando llegó el 24 de diciembre, víspera de Navidad, los alemanes se pusieron a decorar sus trincheras con adornos navideños y empezaron a cantar 'Noche de paz'. Los británicos se sorprendieron y comenzaron a responder con villancicos en inglés. Las balas se convirtieron en alabanzas a Dios. Bernard J. Brooks, sargento de Inglaterra recordaba el hecho y decía: "A última hora de la tarde los alemanes se volvieron divertidísimos, cantando y gritándonos. Dijeron en inglés que, si no disparábamos, ellos tampoco lo harían. Encendieron fuegos fuera de su trinchera, s...
Vida católica: frontera México-Estados Unidos