Ir al contenido principal

Confesionario sin absolución: esparcir sal exorcizada

La pregunta: Padre, ¿cuál es el uso correcto de la sal bendita? ¿Por qué los jóvenes servidores en el evento del Rosario viviente la esparcieron en el piso alrededor de el estadio? ¿Cuál es la forma correcta de usarla? ¿Se toma o se esparce en el piso?

Padre Hayen: Horas antes del Rosario Viviente yo personalmente, junto con un grupo de jóvenes de una parroquia, nos dimos a la tarea de hacer una aspersión de sal exorcizada en todo el estadio olímpico Benito Juárez, suplicando a Dios que el evento estuviera libre de todo influjo del Maligno y que tuviera los efectos y gracias espirituales deseados por todos. El efecto fue maravilloso por los dos factores por los que funcionan los sacramentales: las disposiciones interiores para utilizarlos y la oración de la Iglesia sobre ellos hecha por un sacerdote. La sal y el agua no solamente pueden ser esparcidos sino también consumidos.

La sal y otros objetos religiosos, al recibir la oración de bendición del sacerdote se convierten en sacramentales. Estos son signos externos instituidos por la Iglesia que nos disponen a recibir la gracia de Dios. Esas gracias dependen de las disposiciones interiores que tenemos al utilizarlos y del poder de la oración de la Iglesia que respalda estos signos. Cuando la Iglesia bendice la sal, hace oración pidiendo que su uso obtenga la salud del cuerpo y del alma de los que la utilicen o consuman, y ahuyente y aleje de los lugares donde ésta sea esparcida todo influjo de demonios y espíritus infernales.

El uso correcto de los sacramentales, para no caer en la superstición y utilizarlos como amuletos u objetos mágicos, es utilizarlos con fe y oración. Hay que tomar conciencia de que simbolizan una realidad sagrada, y ello debe debe elevar nuestra mente hacia Dios para alabarle, darle gracias o hacerle una súplica.

Cuando se exorcizan la sal y el agua, la Iglesia suplica al Señor para que traiga la gracia divina, ahuyente los demonios, aleje las enfermedades, para que las casas y otros lugares de los fieles, al ser rociados con esa agua, queden limpios de toda inmundicia y libres de todo mal. Se pide que ningún espíritu inmundo permanezca en ese lugar, y que se frustren ahí las trampas del enemigo. Se suplica también que todo aquello que pueda amenazar la paz espiritual de los que ahí habitan, por la aspersión del agua huyan, y que sea contenido el terror de la serpiente infernal para que la presencia del Espíritu Santo visite ese lugar con su misericordia. Se trata de una oración de exorcismo sobre la sal que cualquier sacerdote puede hacer.

A quienes sufren de infestación demoniaca en sus hogares, principalmente por incurrir en prácticas esotéricas, recomiendo colocar pequeñas cruces en las esquinas de las habitaciones hechas con sal exorcizada, a manera de protección espiritual contra espíritus malignos, siempre invocando la protección del Señor.

Comentarios

Entradas más populares de este blog

Confesionario sin absolución: a mi san Judas se le rompió la cabeza y estoy asustado

Pregunta: Vivo en El Paso Texas y soy devoto de san Judas Tadeo, del cual tengo dos imágenes de yeso que compré. Mi suegra fue a la Ciudad de México y me compró otra imagen más de san Judas. Acomodó la imagen en su coche y cuando llegó a su hotel vio que la estatua tenía la cabeza quebrada. Cuando lo supe quedé muy impactado porque dicen que, cuando eso ocurre, es porque se ha cumplido algo que se le ha pedido al santo. Mi desconcierto fue mayor cuando compré, acá en El Paso Texas, otro san Judas, de color oro, muy bonito, pero al llegar a mi casa uno de los san Judas que ya tenía, estaba con su cabeza rota. Estoy muy impresionado. No sé a qué se deba, padre. A veces creo que el santo está celoso porque tengo varias imágenes de él. Agradezco su tiempo y le pido que me ayude. Padre Hayen: ¿Cómo? ¿Dos imágenes con cabeza rota? ¡Seguramente tú y tu suegra se van a sacar la lotería! Por favor, muchacho, no peques de ingenuidad. Pero además dices que san Judas está celoso porque tien...

380 cadáveres

El hallazgo de más de 380 cadáveres apilados en un crematorio de Ciudad Juárez, esperando durante varios años el servicio de cremación de algunas funerarias que subcontrataron dicho servicio, suscita algunas preguntas. El macabro descubrimiento hace que muchas personas pongan en tela de juicio si las urnas con cenizas que entregan las funerarias a sus clientes contienen las cenizas reales de su ser querido difunto, o si son cenizas de alguien o de algo más. Al despedir después de una ceremonia religiosa o de la velación en la capilla ardiente a un ser querido que ha muerto, los deudos confían en que la funeraria cremará el cadáver y les entregará las cenizas verdaderas. Pero todo puede resultar ser una farsa. Es importante reclamar el cuerpo de un ser querido difunto. Cuando Sara, esposa de Abraham, murió, éste reclamó el cadáver a los descendientes de Het y les dijo:"Aunque yo no soy más que un extranjero residente entre ustedes, cédanme en propiedad alguno de sus sepulcros, para...

Izaguirre y el príncipe del mundo

Los acontecimientos del rancho Izaguirre, en el municipio de Teuchitlán Jalisco, ponen la pregunta sobre el enigma del mal. Tales campos de entrenamiento para el sicariato, narcopanteones y hasta hornos crematorios –reminiscencia de aquellos hornos en que los nazis calcinaban a sus prisioneros durante la Segunda Guerra Mundial– nos habla de los niveles tan extremos de podredumbre que puede alcanzar el corazón del hombre. México se ha convertido en un gran cementerio donde deambulan –como fantasmas a los que nadie hace caso– las madres y padres de las personas desaparecidas."Que mi súplica llegue hasta ti, inclina tu oído a mi clamor", es la aflicción del salmista que bien podemos poner en los labios de tantos familiares angustiados que buscan a su pariente cuyo paradero permanece ignoto. La Sagrada Escritura nos habla de los niveles de maldad que alcanzan niveles sociales: opresión de los pobres, injusticia en los tribunales y adoración de ídolos acompañada de sacrificios hum...