Ir al contenido principal

Pablo y Chita, 75 años de matrimonio

"No se enciende una lámpara para cubrirla con un recipiente, o para ponerla debajo de la cama, sino que se coloca sobre un candelero para que los que entren vean la luz" (Lc 8,16).

Los candeleros del mundo son los reportajes, las fotos de publicidad, las revistas del corazón. Jesús, desde esta perspectiva habría subido al candelero cuando habló ante las muchedumbres en el monte de las bienaventuranzas. Pero ese no era el verdadero candelero. Más tarde subió a su verdadero candelero: la Cruz. Ahí ardió en amor por todos los hombres, y desde la Cruz derramó el Espíritu para todos.

Mis abuelos Pablo Cuarón y María de Jesús Galindo -Chita-, han estado casados 75 años. Desde el 23 de septiembre de 1941, han sido siete décadas y media de predicación silenciosa desde que se casaron en Casas Grandes Chihuahua. Son 75 años de un amor que nos ha predicado en el silencio de todos los días que se ha hecho en la cruz del cumplimento del deber, en el estar juntos en las alegrías y en los momentos penosos y de dificultad.

Celebrar con ellos sus 75 años de bodas es pedir a Dios que a través de este ejemplo de entrega silenciosa, el Señor derrame su Espíritu sobre nosotros, que somos mucho más frágiles para sostener nuestros compromisos y opciones. Es también pedir a Dios que derrame su Espíritu de amor para que muchos matrimonios y familias salgan adelante en la entrega a su vocación con un amor crucificado.

"Dichoso el marido de una mujer buena", dice Eclesiástico 26. Este pasaje exalta las cualidades de la mujer. Es un reconocimiento asombroso de la sabiduría femenina en aquel contexto cultural judío. Pero nosotros añadimos otra lectura: la prudencia, laboriosidad, bondad, servicio, cuidado, discreción, la buena educación, la modestia... de mi abuela lo han enriquecido a él, y viceversa: las virtudes de mi abuelo la han enriquecido a ella.
Cuando se casaron no había intereses externos que los llevara al matrimonio. Eso lleva al fracaso. ¿Qué fue lo que provocó su enamoramiento? ¿Qué hizo que se atrajeran recíprocamente? Fueron las virtudes que descubrieron uno en el otro.

Hay una virtud que siempre les he admirado a los dos, y es la laboriosidad. Han sido un hombre y una mujer de trabajo duro. Conocieron la escasez en sus primeros años y supieron salir adelante con una vida honrada fundado la Compañía Maderera de Chihuahua y después las tiendas Hágalo con casi 70 años de servicio. Mi abuelo, hasta hoy, sigue yendo a su oficina; y mi abuela ha sido una incansable mujer en su hogar. En sus primeros años de matrimonio se hizo una experta en matar pollos tronándoles el pescuezo para preparar un guiso, y después los afanes y trabajos en la granja Las Abejas, que llenan nuestra memoria de muy bellos recuerdos.

Ha sido un matrimonio edificado sobre roca. Ellos no tuvieron mucha instrucción religiosa como las nuevas generaciones la hemos tenido. Sin embargo desde el día que se casaron supieron que el suyo era un proyecto de Dios, y como proyecto que reflejara el amor divino tenía que ser para toda la vida. Setenta y cinco años juntos nos dicen que ellos pusieron en práctica la Palabra de Dios, no tanto con los labios sino con la vida. Habrán visto caer la lluvia, alzarse las crecientes, soplar los vientos. Habrán tenido que decir muchas veces 'te perdono porque te quiero' y hubieron tantas veces de recomenzar de nuevo. Setenta y cinco años después Dios nos permite contemplar su casa de pie.

Su amor nunca se agotó entre ellos dos. Mis abuelos han sabido vivir para los demás. A través de los años quienes somos su familia hemos sido testigos de la preocupación que ellos han tenido por sus hijos, nietos y bisnietos. En innumerables ocasiones hemos visto su desprendimiento para ayudar a que salgamos adelante quienes somos su descendencia.

Y más allá de su familia de carne y sangre, la mano de mis abuelos siempre ha estado abierta para socorrer y abrazar a la gran familia espiritual que todos formamos. Los dos se han involucrado en instituciones, colegios y organizaciones civiles y religiosas para dar ayuda a quien lo necesita. ¡Qué bello ejemplo nos han dado de que a la vida no se viene a ser servido sino a servir.

Los dos están cerca del siglo de vida. Una mirada hacia atrás pudiera encerrar la tentación de decir: ¿para qué tantos afanes, desvelos y esfuerzos? Vanidad de vanidades, todo es vanidad. Si miramos desde lejos pareciera que todo es vana ilusión. Sin embargo si nos acercamos, a través del recuerdo, a tantos momentos bellos y difíciles vividos juntos, descubriremos que Dios ha estado con ellos en las cosas pequeñas de todos los días: cuando estuvieron frente al altar en la iglesia de San Antonio en Casas Grandes, cuando nacieron sus hijos, sus nietos. Cuando recorrieron otras tierras en sus viajes, en momentos tan especiales vividos en la granja Las Abejas, en las reuniones familiares en Ruidoso y en Los Pablos... En tantos pequeños gestos de amor Dios se manifestaba. Por eso los recuerdos no son vanidad, sino gratitud inmensa al Dios que se hace pequeño, como se hizo pequeño en un pesebre o colgando de una cruz.

Hoy mis abuelos no pueden caminar. Ellos pasan muchas horas juntos frente a un televisor y para moverse necesitan ayuda. Pero Dios se sigue manifestando cuando se toman de la mano sentados en ese sofá, cuando se siguen sonriendo y animando a seguir adelante, hasta el final. Ahí sigue estando Dios en el sacramento del matrimonio, diciéndonos cuánto nos quiere, cuánto nos ama.

Comentarios

Entradas más populares de este blog

Católicos y rituales paganos

La nueva presidenta Claudia Sheinbaum, quien dice ser no creyente, empezó su gobierno participando en un ritual de brujería. Hago algunas observaciones con este hecho: 1. Muchos ateos se niegan a creer en el Dios revelado por Cristo debido a que ello exige conversión y compromiso moral, y prefieren dar cauce a su sensibilidad espiritual a través de rituales mágicos de protección contra fuerzas que los puedan perjudicar. Es decir, en el fondo, muchos que se confiesan ateos creen que existe algo que está más allá del mundo natural. ¿Será que la presidenta, en realidad, no es tan atea? 2. Participar en un ritual religioso indígena debería de ser motivo de escándalo para los jacobinos y radicales de izquierda que proclaman la defensa del Estado laico y la no participación de un político en actos de culto público. Ellos deberían de ser coherentes y lanzar sus rabiosos dardos a la presidenta. Si Claudia Sheinbaum hubiera sido bendecida por algún sacerdote con sotana y sobrepelliz a las puert...

La muerte del padre Rafael, mi vicario

La tarde del domingo 15 de diciembre fue dramática en la Catedral. El padre Rafael Saldívar, vicario parroquial, se debatía por la tarde entre la vida y la muerte por una baja en su presión arterial. Al padre Arturo, vicario también, y a mí, nos tocó auxiliarlo y trasladarlo al hospital. Desafortunadamente el padre llegó sin vida a la clínica. Hace ocho años recibí al padre Rafael como vicario de catedral para su integración al trabajo pastoral. El martes 17 de diciembre lo recibí dentro de su ataúd en la puerta del templo. Aquel mandato de Jesús a sus sacerdotes: "id por todo el mundo a predicar al Evangelio" de pronto se transformó en "vengan benditos de mi Padre". Después de estos años de haber caminado juntos en las labores de la parroquia, doy gracias a Dios por el servicio que prestó a la Iglesia así como por la relación fraterna y amistosa que tuvimos. Recibimos su cuerpo sin vida iniciando las ferias mayores del Adviento, leyendo la genealogía de Jesucristo...

Sanación del árbol genealógico

En las últimas décadas diversos grupos y personas en la Iglesia hacen oración para limpiar de pecados su árbol genealógico. Esta práctica es llamada "sanación intergeneracional". Incluso hay sacerdotes que la promueven haciendo misas con ese propósito. Es un grave error. Algunas conferencias episcopales como la de Francia y de Polonia, y ahora la española, se han pronunciado en contra de esta falsa doctrina y pésima práctica. Conocida también como la "sanación del árbol genealógico", la sanación intergeneracional tuvo su origen en los escritos del misionero y terapeuta anglicano Kenneth McAll, quien trató de hacer una conexión entre ciertas enfermedades y las fuerzas del mal. En ámbito católico fueron John Hampsch y Robert DeGrandis quienes popularizaron la práctica en grupos carismáticos. Según estos autores, existen pecados no perdonados, cometidos por los antepasados de una persona, que hoy tienen efectos perniciosos en sus descendientes y que se manifiestan a tr...