¿Podemos hablar hoy de agua bendita, de exorcismos y de lugares donde hay una fuerte presencia del mundo sobrenatural? La fe en los sacramentales de la Iglesia Católica ha venido a menos en un mundo cada vez más dominado por la tecnología y en donde prevalece la narrativa del cambio climático, discurso que convierte al planeta en un fin en sí mismo, en una especie de diosa Tierra. La naturaleza visible se ha convertido en una deidad que está por encima del hombre: la Madre Tierra o la Pachamama. El discurso persistente del calentamiento global ha colocado el valor de este planeta por encima del valor y la dignidad de la persona humana. Muchos se empeñan en reducir la realidad sólo a lo que los ojos observan en el mundo visible. Si la naturaleza adquiere características divinas, y si el mundo invisible y sobrenatural tiende a desaparecer de la conciencia de los hombres, ¿tiene sentido emprender una peregrinación a un santuario o trazar la señal de la Cruz en la frente y el pecho? Si tod...
Vida católica: frontera México-Estados Unidos