La Secretaría de Educación Pública ha dado marcha atrás a un punto muy importante en la Reforma Educativa promovida por el presidente Peña. Chantajeado por el CNTE, el gobierno decide suspender las evaluaciones a los maestros. Es una vergüenza para México tener un gobierno débil que se arrodilla frente a la mafia de maestros que no permiten el avance de la educación en el país. Con plantones, marchas y amenazas de boicotear las elecciones en Oaxaca y Guerrero, los maestros se salieron con la suya. La cobardía del gobierno, la misma que mostró hace unos años Vicente Fox al cancelar la construcción del aeropuerto, ha mostrado la falta de interés de la administración federal por garantizar la calidad en la educación que necesita México. Parece que en nuestro país sólo prospera la ineficiencia y las mafias nefastas que sólo cuidan sus intereses.
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